lunes, 6 de junio de 2011

Cuando el Amor es una Mierda.-

El amor es un todo. Vale, que puede ser equidistante y a dos bandas, vale que puede ser desequilibrado, inexacto, egoísta y generoso, y vale que te puede tocar una loca en la caja de bombones, y vale que puede ser bonito. En cierta etapa de mi vida, a mí me tocó una paranoica, pero luego me hice seguidor de la mitología griega y en la agencia de Eros encontré un semblante bonito, confidente y afectivo. Aunque no me apasionan ni los tonos afectados, ni la confitura poética, diré que he sido jodidamente feliz con María. Vale, ya.
Y luego está el amor cuando es una mierda. El amor unilateral. El amor sin recompensa. Como esas canallas de los realities que destrozaban a sus parejas a los ojos de todo el país. Recuerdo a una tía con cara de rábano que decía ser virgen, sacando la mierda del alcoholismo de su novio. Podría haber sido uno de los episodios más vomitivos de la vida grabada en la tele. Como esos amores restringidos que viven en paralelo una especie de luto por parte del flechado y una indiferencia del ser pretendido, viajero apático e indolente entre las arterias de un corazón enfermo y trágico. Como aquella camarera de Minessota, o la novia de tu primo, o la madre de tu amigo, seres amados sin correspondencia ni recepción. Conviene aclarar que quien piense en amores discordantes durante los tiempos del mercadeo de la noche, porque paga una copa sin derecho a cama, necesita un psiquiatra ya, y una tutoría de Giacomo Casanova.
Y cuando el amor es una mierda, porque uno ama  y otro vive en la dicha del forastero, las alternativas chungas son llorar hasta reventar, dejar pasar la vida en un lento suicidio, beberse hasta el agua de los floreros al estilo Fitzgerald,  dedicar toda una vida a intentar conocer a Mónica Bellucci, echarse por novia esa dama que llaman heroína,  o comprar el amor a precio de puta. Y también la más rentable posiblemente, tratar de vivir y buscarse un héroe entre los entresijos del alma. A fin de cuentas, la vida aparte de corta, es un carrusel intermitente del que se sale muerto. Como para hacerte novio de una entelequia. 
   

9 comentarios:

  1. Son dos dias, habrá que quererse bien y bonito, Marta

    ResponderEliminar
  2. El amor es el motor. Pero efímero e intermitente, estánoestáestánoestáestánoestá y cuando está, se nos olvida que luego no está. Y se pasa como el culo, pero luego está otra vez.
    Pasando de licores fuertes, mejor tirarse a la cerveza y/o a quien haga falta, no te destroces el hígado, que ese sí hace falta hasta el final,
    beso y abrazo

    ResponderEliminar
  3. El amor es complicado, pero todo es cuestión de encontrar a la persona que encaje con cada uno…

    dirty saludos¡¡¡¡

    ResponderEliminar
  4. El amor es una de las mejores cosas de la vida pero al mismo tiempo es una de las cosas que más sufrimento puede causar.Cosas de la vida!!!!
    Lo importante es disfrutar de lo bueno mientras dura.:)
    besitos!

    ResponderEliminar
  5. 2 , Marta, 2, 2 besos
    Hay que cuidarlo y querer cuidarlo, bss, Jeza
    That´s the question, Dirty, bss
    Bolboreteira, porqué irán tan unidos el amor y el sufrimiento? bss

    ResponderEliminar
  6. Soy capaz de vivir sin amor y con el, aunque reconozco que siempre he amado más de la cuenta...

    Besicos

    ResponderEliminar
  7. Va en mi apellido...soy Amador (vaya que no Amado) así que estoy bien jodida...

    No puedo decir que no haya tenido suerte...es que he elegido como el culo siempre.

    Uff que me caliento...podríamos estar horas en el Bar!!!

    Ah! un saludito a Maria y felicidades a tí por ser tan Feliz!

    ResponderEliminar
  8. Que interesante una tutoria de Giacomo Casanova.

    ResponderEliminar
  9. jajajaj el amor yo digo q quien lo hiso no tenia nada q hacer

    ResponderEliminar