viernes, 29 de abril de 2011

Putas, Mafia y Estado.-


El mundo es una enorme casa de putas. A veces jugamos a putas, y a veces a clientes, entre el yugo, la servidumbre y la coacción. Primero está el gran problema: la esclavitud. Quien piense que la explotación de la mujer se retiró ya del planeta, seguramente sea amigo de Bambi y de esa horrible gata japonesa y cabezona, llamada Hello Kitty. Quien lo crea es un panoli que toma té con la infanta Elena, y viene a ser un persona curiosamente impersonal. La esclavitud se viste de putas, se disfraza con tacones, escotes imposibles y minifaldas baratas, y se va a la calle Montera o al infame club de carretera. Eso es así y los pimientos son asaos. Y los proxenetas, los putos amos de las putas. De un tiempo a acá se viaja mucho a Brasil y a Rumania, y se organizan cacerías de mujeres. El embauco universal del pobre (que no aprende): te prometo un mundo mejor y te entrego una vida de mierda. Y el american dream tiene forma de billete de cincuenta euros, y divide el tiempo en completos de veinte minutos y mamadas de cinco, y si me dejas por el culo te la hinco. Aquí se viene a comer kebabs, a follar y a poner cara de puta, ese es tu Dorado, princesa, no te contamos el final del cuento, ah, y págame que así es el bussiness de los grilletes invisibles. Vale, y también están las putas caras, que llevan datáfono y no le han visto el morro a un kebab en su vida. Tú te vas de putas y ellas te llevan de ruina y de copas, y se llaman señoritas de compañía. Y luego, está la mala literatura de putas, o libros de favores que se hacen jugando al 69, y vienen traducidos del griego y del francés, tipo La Reina en la Torre de Marfil, Sabor a Hiel, La Presidenta, Kamasutra sin Límites, que son libros hechos de mierda y de aire,  y que vienen a ser una orgía de negros, editores y personajes de cierta relevancia, donde él que pone el culo, es el negro. Y para terminar, el Estado, nuestro proxeneta, y nosotros sus putas. Velo por ti y te custodio con mi demagogia, y si no cumples tus obligaciones, te castigo. Como el proxeneta de la mafia y la puta rumana. Qué paralelos. Maldita vida.



10 comentarios:

  1. Buenísimo, como tú dices, qué paralelos. Marta. ME encantó

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  2. Marta, en paralelo, llevo yo hoy un día de mierda, bss
    Sí, Blue, bs

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  3. Pues si Javier... la verdad es que yo pienso que somos esclavos, sin más...

    Besicos

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  4. El estado no te jode, te viola .

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  5. Tan antiguo como la propia existencia...pero vaya! espero que hoy tengas un dia mejor! si te sirve de consuelo, el mio tambien ha sido un mierda!

    Un beso

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