martes, 7 de febrero de 2012

El Otro Día Estuve con el Mismo Dios.-

El otro día me di una vuelta por el Cielo porque Dios tiene internet de banda anchísima, super fiber to the heaven y me mandó las claves para dárselas a San Pedro antes de entrar, a través de Jim Morrison. Dios no es tanto como dicen un concepto teológico, filosófico y antropológico. La verdad es que es un Tío Atípico. Normal, normal, no es, pero tampoco es un ojo etéreo y abstracto en mitad de un triángulo. Enorme Mentira. Es tangible. Dios es Viejo, y se puede decir que adquirió protagonismo cuando murió Matusalén, muerto gracias al Diluvio Universal que había enviado el mismo Dios para que escribieran en el Génesis lo que realmente fue una conspiración entre Noé y Dios para hacerse con el Planeta. ¿Ustedes qué harían si ven a un paranoico construyendo un barco en el desierto de Ararat? Yo creo que ustedes se mofarían, pero me temo que puede ser muy peligroso un hombre omnipotente, omnipresente y omnisciente hastiado de la perversión humana, y eso Noé lo sabía de buena tinta. La puede liar muy parda y enviar una tempestad apoteósica del copón. Se puede decir que metafóricamente Bush era Dios y Aznar, Noé. Aznar siempre estaba dispuesto a construir barcas para Bush, porque sabía que diosito Bush le podía castigar con el Diluvio Universal, pero al final ha habido hostias para inventar el Diluvio Universal everyday by the face. El mundo está lleno de diluviadores universales y de Noés construyendo barcas. Pero en fin, prosigo, como decía, Dios es viejo, más o menos como un profeta hindú muy, muy trasnochado, y absolutamente anacrónico con respecto a todos ustedes, que van todos iguales. Y tiene este aspecto:

De buena gana le hubiera hecho una foto, pero en el cielo están prohibidas las cámaras de fotos. A mí me dio la impresión, de lo poco que hablé con Dios, de que pasa de todo. No diré que fume marihuana y beba cervezas con la gente anarkista que haya en el Cielo, porque no sería verdad, y yo no lo he visto, pero en la media hora que le acompañé, se mostró indolente, demasiado abúlico para tanta Energía que nos han vendido. Con dos querubines trompeteros a los que Dios les echó la bronca porque les tuvo que explicar que yo no me iba a morir y que se fueran a recoger cadáveres en un hospital de Nebraska,  y  uno de los secretarios de San Pedro, que precisamente es Jim Morrison, un tio guapo de veintisiete años (porque en el cielo tienes la edad de tu muerte) que ahora es dealer de una heroína maravillosa que no mata nada porque ya estás muerto, poeta y músico, y por supuesto dueño del Morrison Hotel, que es el nombre del quinto albúm de los Doors. Ah, y secretario de San Pedro, más que nada porque se lo quiere meter en el bolsillo y  tomarle terreno para negociar un negocio de chamanismo, y que la comunicación entre la gente del Cielo y la gente de la puta tierra sea más fluida. Y por ahí me contactó, como les conté, por Internet parasicológico. Pero a lo que iba, Dios pasa de todo. Le pregunté por el Terremoto de Haití, y me dijo que no había sido inducido, y que Él no tenía la culpa de las fuerzas generadas por los límites de las placas tectónicas. Le pregunté por Somalia, y suspiró, sí, con cierta resignación, pero con impotencia, que lo intentó una vez pero ahora la hambruna y el conflicto le superaba. Ah, y que Él se encontraba muy viejo para estas vainas. Entonces, yo le dije: pero si Usted, Señor Dios, siempre ha estado viejo. Y mi declaración no le inquietó ni lo más mínimo, porque Dios tiene muchas tablas. Tantas como Moisés y las tablas de la ley. No hay quien pueda con la gente mitológica, interioricé. A continuación le pregunté por Bin Laden, y me dijo que el terrorismo islámico era competencia de Alá, y Él no tenía jurisdicción ni en la movidas de los niveles de la Yanna, ni en la aberración de las setenta y dos vírgenes para los mártires musulmanes.
No crean que varió aquella inflexión de repeler con cierta indolencia mis balones. Continuó en la misma tónica. Me comentó que en tiempos del Holocausto se le colapsó el Cielo de judíos, y que acabó reventado de tanta omnipotencia. La indemnización con tres millones de casas de piedra con piscinas naturales, y un millón de jardines de rosas y sauces llorones había llevado su tiempo y le había pasado factura física y psicológica, porque también tuvo que recomponer más de cinco millones de cuerpos. Ah, y que no pudo hacer nada, que Hilter era un caso perdido de antemano, que aparte de antisemita y anticomunista, era borderline, y no había Dios en el Cielo con posibilidades de éxito ante el genocidio. Pues igual con ETA (aquí se ponía estupendo Dios y lo llamaba Euskadi Ta Askatasuna), nuestra Guerra Civil, la batalla de Trafalgar, los Jemeres Rojos de Camboya, la Segunda Guerra Mundial y las torturas de la Inquisición. Entonces ya me revolví de mi asiento de nube y le hablé serio:
- Joder, Señor Dios, de tanto dejar el planeta en manos de los hombres, mire como nos tiene, da vergüenza mirarnos, no sé donde está su omnipotencia. Explíqueme, porque no la veo...
- Mira no me jodas, vete yendo a la tierra, que tengo trabajo con las trasmisiones del Concordia, hoy hay un huevo de elevaciones. Además, en cinco minutos me llegan cuarenta de Ciudad de Juárez.  
Y de repente creó una atmósfera vaporosa, que me desapareció y emergí en la taberna La Ardosa. Y como yo entiendo muy bien las cosas con una cerveza, pensé que nosotros éramos las pesadillas de Dios en el Cielo y que la tierra no le molaba nada. A la vista.
Luego estaba San Pedro, que tenía esta fachada:

7 comentarios:

  1. La interné del cielo pa mí que es más de manga ancha. Porfi, si os hacéis coleguitas, le puedes preguntar por Newman (Paul)?
    Lucidez la tuya con la rasca siberiana,

    besos

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  2. Llámame next time, haha. Marta, b

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  3. Te llamo, Marta.
    Jeza, Paul se pasa el día haciendo rallies y jugando al billar. Se bebe cinco litros de Heiniken Heaven al día con su amiga Amy Winehouse y se lía todos los viernes por la noche en el garito de John Lennon con la bella Natalie Wood. Mis noticias, hasta ahora. Besos

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  4. Lo que más me gusta de tu dios es que es muy dicharachero y campechano, como un rey que yo me sé...jeje
    [No me extiendo que se me va el tiempo...el único dios en el que creo y, a veces, lo pierdo
    Tenemos una birria pendiente, tal vez este viernes a las siete, por la tarde, después de clases]
    Breves
    Deica

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    1. Qué bueno sentirle de nuevo. Mi único problema es que salgo a las 20:30 h, pero estamos en contacto. Saludos. Javier

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  5. vaya conversación amena te pegaste con el de allí arriba, a mí tb me gustaría hablar unas cuantas cosas con él, ya me prestarás tu banda ancha...

    dirty saludos¡¡¡

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    1. Dirty. Como dicen por allí arriba, es campechano, enrrollao, casi juancarlista, pero claro, sirve para poco.

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